Las pruebas de choque son un proceso crucial y necesario para garantizar la seguridad de los conductores, pasajeros y peatones en la carretera. Este tipo de pruebas, que también se denominan pruebas de impacto, es el proceso científico de examinar cómo responde un vehículo a un choque simulado. A través de estas pruebas, los ingenieros de seguridad pueden obtener información importante sobre cómo se comporta un vehículo en caso de colisión y qué modificaciones hay que hacer, si es que hay que hacerlas, para que el vehículo sea más seguro. Las pruebas de choque se llevan a cabo en laboratorios y en carreteras públicas, lo que permite una evaluación exhaustiva de las características de seguridad del vehículo. Los datos recogidos en las pruebas de choque se utilizan para desarrollar normas de seguridad mejoradas que ayuden a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico.

¿En que consisten las pruebas de choque?


Una prueba de choque es la colisión controlada de dos vehículos. Los vehículos pueden ser réplicas exactas de modelos de producción o vehículos de prueba especialmente diseñados que están equipados con sensores para registrar datos como la desaceleración y la aceleración, la velocidad del vehículo y otras mediciones. En una prueba típica, se conduce un vehículo contra una barrera fija a una velocidad determinada. La prueba simula los efectos de una colisión reproduciendo la aceleración, la desaceleración y el impacto del vehículo con otros vehículos. El objetivo es medir la eficacia de los dispositivos de seguridad de un vehículo -cinturones de seguridad, airbags y la resistencia de su estructura- para proteger a los ocupantes en caso de colisión. La prueba se realiza en un entorno controlado, como un laboratorio o un campo abierto. Durante la prueba, los vehículos se vigilan cuidadosamente. Cámaras situadas dentro y fuera del vehículo registran la reacción de los ocupantes, mientras que los sensores miden las fuerzas que actúan sobre el vehículo.

Beneficios de las pruebas de choque

Tras un accidente, los investigadores suelen buscar pistas sobre la causa del mismo examinando los vehículos implicados. Es importante entender cómo se construyeron estos vehículos y cómo reaccionaron durante el choque para poder evitar los mismos errores en el futuro. Aquí es donde entran en juego las pruebas de choque. Mediante el proceso científico de examinar cómo responde un vehículo a un choque simulado, las pruebas de choque pueden ayudar a los ingenieros a entender las fuerzas que actúan sobre el vehículo, los daños causados y las modificaciones que deben hacerse, si es que hay alguna. Esto, a su vez, puede contribuir a que los vehículos sean más seguros y a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico. Las pruebas de choque se realizan en un entorno controlado, como un laboratorio o un campo abierto. Durante la prueba, los vehículos se vigilan cuidadosamente. Cámaras situadas dentro y fuera del vehículo registran la reacción de los ocupantes, mientras que los sensores miden las fuerzas que actúan sobre el vehículo. Al estudiar los resultados de estas pruebas, los ingenieros pueden mejorar el diseño de los asientos y los airbags, la resistencia de los bastidores de los vehículos y otros elementos de seguridad.

Tipos de pruebas de choque

Hay dos tipos principales de pruebas de choque. Son los frontales y los de desplazamiento. Una prueba de impacto frontal simula una colisión frontal y mide lo bien que el vehículo protege al conductor y al pasajero del asiento delantero. Este tipo de prueba de choque se utiliza principalmente para medir lo bien que los asientos y los airbags del vehículo protegen a los ocupantes. En una prueba de desplazamiento, un vehículo choca contra el lateral de otro. Al realizar estas pruebas, los ingenieros pueden determinar lo bien que el bastidor del vehículo y otros componentes estructurales protegen al conductor y a los demás ocupantes si el otro vehículo está cerca. Además de los dos tipos principales de pruebas de choque, también existe la prueba de impacto lateral que simula una colisión con un objeto fijo, como un árbol o un poste de teléfono. La prueba de impacto lateral se realiza con dos vehículos, uno de ellos fijo. Los ingenieros utilizan esta prueba para ver cómo protege el vehículo al conductor y a los demás ocupantes en caso de colisión lateral.

El diseño de los maniquíes de pruebas de choque


Los maniquíes de pruebas de choque son una de las partes más importantes de las pruebas de choque. Ayudan a los ingenieros a entender cómo respondería un ser humano en una colisión. Los maniquíes de choque se calibran cuidadosamente para representar con exactitud el cuerpo humano medio. También están equipados con sensores para registrar datos como la desaceleración y la aceleración, la velocidad del vehículo y otras mediciones. Además de los maniquíes de prueba, en las pruebas de choque también se utilizan personas reales en varias posiciones dentro del vehículo para simular todo tipo de pasajeros en caso de accidente, incluidos niños, ancianos y personas con movilidad limitada. Los datos recogidos en estas pruebas se utilizan para desarrollar normas de seguridad mejoradas que puedan ayudar a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico. Los maniquíes de las pruebas de choque tienen todo tipo de formas y tamaños, dependiendo de a quién representen. Un maniquí típico de hombre adulto mide entre 165 y 190 cm y pesa unos 75 kg. El maniquí femenino pesa aproximadamente un 10% menos que el masculino. Los maniquíes infantiles se reducen para representar el tamaño de los niños de 9 a 12 años. Los sensores del maniquí miden cosas como la cantidad de fuerza aplicada a la cabeza durante una colisión o la presión aplicada a las piernas por el cinturón de seguridad.

Simulación de laboratorio de pruebas de choque

La prueba de choque se realiza en un entorno controlado, como un laboratorio o un campo abierto. Durante la prueba, los vehículos se vigilan cuidadosamente. Cámaras situadas dentro y fuera del vehículo registran la reacción de los ocupantes, mientras que los sensores miden las fuerzas que actúan sobre el vehículo. Al estudiar los resultados de estas pruebas, los ingenieros pueden mejorar el diseño de los asientos y los airbags, la resistencia de los bastidores de los vehículos y otros elementos de seguridad. Las pruebas de choque se realizan en laboratorios y en carreteras públicas, lo que permite una evaluación completa de las características de seguridad del vehículo. Los datos recogidos en las pruebas de choque se utilizan para desarrollar normas de seguridad mejoradas que ayuden a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico. Las pruebas de choque se realizan en laboratorios y en carreteras públicas, lo que permite una evaluación completa de las características de seguridad del vehículo. Los datos recogidos en las pruebas de choque se utilizan para desarrollar normas de seguridad mejoradas que ayuden a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico.

Resultados de las pruebas de choque

Las pruebas de choque se llevan a cabo utilizando dos vehículos: uno que está fijado en un lugar, como una barrera de hormigón, y otro que se conduce contra la barrera a una velocidad determinada. Se mide la cantidad de fuerza necesaria para que el vehículo en movimiento se detenga tras el impacto. Los ingenieros suelen utilizar los datos de varias pruebas para confirmar la fiabilidad de los resultados y tener en cuenta las variaciones de los firmes. Además de medir la fuerza del impacto, los ingenieros también utilizan sensores dentro de los vehículos para registrar información como la velocidad del vehículo, la aceleración de los pasajeros y el tiempo que tardan en inflarse los airbags. Los resultados de las pruebas de choque incluyen información sobre el tipo de barrera contra la que chocó el vehículo, la velocidad del impacto, la cantidad de daños en el vehículo y la cantidad de fuerza que se aplicó a los pasajeros del vehículo. Los datos recogidos en las pruebas de choque se utilizan para desarrollar normas de seguridad mejoradas que puedan ayudar a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico.

Tecnología avanzada de pruebas de choque

Las pruebas de choque modernas utilizan sensores, cámaras y programas informáticos para medir la fuerza del impacto y los daños en los vehículos. Los ingenieros utilizan estos datos para evaluar diferentes elementos de seguridad, como los cinturones de seguridad, los airbags y la integridad estructural del vehículo.

  • Sensores: los sensores integrados en la estructura del vehículo miden fuerzas como la aceleración y la desaceleración que experimentan los ocupantes del vehículo en un choque. Las unidades de control electrónico (ECU) también se utilizan para medir la velocidad, las revoluciones del motor y otras funciones del vehículo.
  • Cámaras: las cámaras montadas en el interior y el exterior del vehículo graban la reacción de los ocupantes durante el choque. Los ingenieros utilizan estos datos para evaluar si los diseños de los asientos y los airbags son eficaces para proteger a los ocupantes del vehículo.
  • Software informático: el software informático se utiliza para analizar los datos recogidos durante la prueba. Los ingenieros pueden determinar en qué medida los componentes estructurales del vehículo resisten el impacto y si son necesarias más modificaciones para reforzar el bastidor del vehículo.

Reglamentos y normas sobre pruebas de choque

Las pruebas de choque se llevan a cabo para evaluar las características de seguridad de los nuevos modelos de automóviles y para desarrollar normas de seguridad mejoradas que ayuden a reducir el número de lesiones graves y muertes causadas por accidentes de tráfico. Cada dos años se anuncian nuevas normas de seguridad, introduciendo nuevas normas y revisando las existentes. La NHTSA y la SAE publican los reglamentos y normas de las pruebas de choque.